Evitar malos olores en la nevera

Este es un planteamiento que pocas personas están dispuestas a debatir, pero el agua de cada casa tiene un sabor, y esto es porque los alimentos que hay en la nevera pueden influir con sus olores; la cebolla, por ejemplo.

¡Basta de tomar agua con sabor a cebolla! ¿Qué hacer cuando desprende aromas que no son agradables al olfato? De eso vamos a hablar en este artículo, de cómo evitar malos olores en la nevera.

 

¿Por qué mi nevera huele mal?

La respuesta es simple: las bacterias son las culpables. Tenemos que identificar qué alimento está en nuestra nevera, un posible causante de los malos olores.

Cuando un alimento entra en estado de descomposición empiezan a proliferar microbios que se encargan de darle esos colores amarillentos y verdosos, que no es más que moho y levadura que nace a partir de la materia orgánica y la humedad.

 

Pasos para evitar los malos olores en la nevera

Ahora es momento de hacer un trabajo visual y nasal. En vista de hay muchos envases y alimentos guardados en la nevera, debemos ir destapando y oliendo en búsqueda del mal olor que está invadiendo el frigorífico.

¿Qué más debemos hacer?  A continuación, te daremos una breve explicación del proceso a llevar a cabo para evitar los malos olores en la nevera:

 

Despejar la zona

Primero debemos desconectar la nevera y luego sacar de ella todo lo que hay dentro. De esta forma hacemos un despeje total que nos permita saber de dónde viene el malo olor que impregna el frigorífico.

Por otro lado, si no queremos apagarlo, podemos cambiar la temperatura del termostato para que siga funcionando mientras hacemos la búsqueda.

 

La prueba del olor

Como dijimos, debemos hacer un trabajo de campo que implica usar nuestro sentido del olfato para identificar a los sospechosos. Debemos ir desde la leche, las sobras hasta los alimentos cocidos (mariscos, carnes y verduras), también debemos revisar las fechas de caducidad.

Es por ello que para ayudar a prevenir futuros olores molestos, lo ideal es que hagamos uso de envases de vidrio o de plástico que puedan conservar mejor los  alimentos que almacenamos en la nevera.

 

¿Con qué puedo limpiar la nevera?

Es muy recomendable con bicarbonato de sodio para hacer la limpieza de la nevera, puesto que no hace un desequilibrio en el olor de la misma. Por otro lado, puedes comprar un atomizador especial y, en casos extremos, se puede usar agua con lejía.

Es importante tener en cuenta que el método que elijamos para limpiar no puede tener olores fuertes, puesto que pueden afectar el sabor y el olor de los alimentos.

Así que, mejor nos inclinamos por una solución de vinagre, agua y bicarbonato y procedemos a remover la suciedad con ayuda de un paño húmedo o un viejo cepillo de dientes. Secamos y luego volvemos a ingresar los envases y alimentos.

Al final del día, podeos evitar malos olores en la nevera si somos más ordenados y estamos más al pendiente de lo que hay en su interior.